//Por; Jesús Hoyos Hernández//Leyendas//Relatos//Estados//

LEYENDA DE AMOR DEL TENTZO

El Tentzo "El Viejo Barbado" que murió por una gran pasión de amor, pero le dió vida al Puente De Dios. Cuenta la Leyenda que el Tentzo fue el Cerro más viejo de todas las cadenas Montañosas en la región y hasta que la vista nos permite alcanzar en nuestros pueblos. El Tentzo está al Oeste de Molcaxac. Empieza en Tetela Valsequillo, encumbrando en San Juan Tzicatlacoyan, pasando por San Antonio Juárez, Huatlatlauca, San Juan Atzompa, La Magdalena Tlatlauquitepec, Atoyatempan y Molcaxac, entre otras localidades.

El Reino del Tentzo era muy grande, muy rico, muy poderoso, no había otro Señorío que pudiera igualarlo, Contaba con muchas tierras, mucho ganado , con muchas Joyas, Era un gran señor. De repente en el noroeste apareció otro señorío El Popocatépetl, e inmediatamente la Iztaccihuatl, pero de inmediato El Popocatépetl se enamora de la Iztaccihuatl, y se comprometen.

La Leyenda cuenta que un día por el Otoño hicieron el Amor tan apasionadamente, que ella queda agotada y le da mucho sueño, Y ahí se queda dormida para siempre, Por el contrario su enamorado el Popocatépetl la amaba tanto que no la abandona, y se queda ahí también para siempre cuidándola , velando su sueño, fumando su cigarro.

Luego en el Norte aparece una Joven Delgada muy hermosa, y muy encantadora de origen Veracruzana, Llamada Malintzin de la cual el Tentzo se enamora rápidamente. Le ofrece regalos, y como no tiene ningún otro pretendiente , ella acepta, el Tentzo ya es viejo y ella muy joven. El Tentzo le ofrece riquezas, y le pide matrimonio.

Ella contesta que lo va a pensar, El Tentzo cree que no tiene ningún rival, Que no hay otro Señorío tan grande y poderoso como el, le sigue dando regalos y al parecer a ella le agrada, El Tentzo se siente Feliz, cree que es correspondido y se sonríe para sus adentros diciendo, que una de estas noches cena rico el Tentzo, y que este arroz ya se cosió.

De repente aparece uno de sus emisarios todo asustado, preocupado, y callado, El Tentzo le pregunta qué pasa???

Porque estás así??? El contesta , Señor le tengo muy malas noticias, El Tentzo impaciente ordena, habla. El emisario responde: es que al parecer le están haciendo de chivo los tamales.

Que???? Quien se atreve a desafiar al Tentzo con tanto poder??? Quien es el Osado que se atreve??? Cuando no hay nadie a mi altura?????

Luego se calma un poco, y pregunta: y dónde está ese que se atreve a desafiarme??? Acaso es poderoso como yo???

El emisario contesta señalando al noreste con su brazo ahí está. El Tentzo levanta la vista y ve a lo lejos al rival que ha aparecido de momento, y se aprecia a lo lejos Altivo, Gallardo, imponente, Juvenil, Apuesto el Pico de Orizaba. Bajó triste la mirada, mirando que el rival no era pequeño, y que sus sueños estaban por derrumbarse.

Y pensó: me la voy a jugar el todo por el todo, Así que junto algunos sirvientes para llevarle muchos regalos y pedirle Matrimonio a la Malintzin, Pero se confirmó su temor , La Malintzin no acepto casarse con el, No la había convencido el dinero , ella deseaba a un pretendiente Joven , y el Tentzo ya era Viejo.

Entonces el Tentzo decidió jugarse la última carta, y le dijo: "yo he estado muy enamorado y muy apasionado por ti, y tú alimentaste mis esperanzas, no puedes dejarme y entregarte a otro, sin antes hacerlo conmigo; Te doy todo lo que quieras ; tierras, ganado, joyas, dinero , lo que quieras a cambio que te acuestes tres veces conmigo, porque el fuego de mi pasión me quema el alma, y soy capaz hasta de perder la vida".

La Malintzin se dio cuenta que la situación no era fácil porque de alguna manera le había dado esperanzas, Entonces pensó rápidamente en un plan un poco arriesgado pero que podía librarse de la obsesión peligrosa del Tentzo.

Así que le contesto: vamos hacer un pacto,"Yo me voy a orinar y si tú logras atajar mis orines , entonces me entrego a ti por Tres veces y después no me vuelves a ver, pero si tú no logras atajar mis orines entonces , no pasa nada entre tú y yo , además ya no me volverás a ver ni a molestar".

El Tentzo acepto gustoso, pensando que lo lograría y haría suya por tres veces a la Malintzin,

El pregunto , para cuando???

Era por el mes de mayo , así que ella respondió para el 24 de Junio.

El día llegó, el día 24 de Junio el día de San Juan, la Malintzin por la mañana le pidió al Dios Huitzilopochtli que calentará lo más que pudiera, luego atajo todas las nubes que pretendían pasar por la Malinche, En la tarde pidió ayuda al Dios Tlaloc que le mandara mucha lluvia, Luego también pidió ayuda al Dios Quetzalcóatl que le mandara un poco de viento; Se enfrió la tarde , sopló con fuerza ,se desató una gran lluvia, en la ciudad de Puebla, en Amozoc, Acajete, en Grajales, Ciudad Serdán, Tepeaca, Tecamachalco, Tochtepec , Tepeyahualco, Tecali, Torija, Valsequillo, Tlanepantla, Hueyotlipan, Ahuatepec, y toda la región.

El agua crecía y corría, haciendo pequeños ríos.

Hizo un río grande , el Atoyac, toda esa agua que cayó desde Puebla, Tepeaca, Tecamachalco, y pueblos cercanos, una parte caía al Río Atoyac , y el agua que no caía, la estuvo atajando el Cerro del Huicanetl, y no dejo pasar nada de agua por el contrario , toda esa agua la aventó al Río Atoyac.

El Tentzo al ver correr el agua que en sentido figurado eran los orines de la Malintzin, se sonrío primero y puso su pie, Pero el agua crecía más y más, cuando vio que ya no era posible atajarla con su pie, desesperadamente se acostó estirando los brazos para atajar los orines de la Malintzin.

Pero que creen que paso???

De pronto el Tentzo se da cuenta que los orines de la Malintzin estaban pasando debajo de sus costillas, por el ángulo que se hace al acostarse; entre las pompis y las costillas (más si se tiene cintura).

Al percatarse que había perdido toda posibilidad de hacer suya, de hacerle el amor a la Malintzin, le dio una gran rabia, coraje, y una gran desilusión que ahí mismo se quedó acostado para siempre estirando los brazos , y provocando la Construcción Natural del Puente De Dios, pasando el agua del Río Atoyac por abajo.