//Por, Jesús Hoyos Hernández//Nacional//Análisis//Política//Opinión
Capilla del Pocito en la Villa de Guadalupe. Ciudad de México
Fue edificada sobre un pozo cuyas aguas azufradas se consideraban milagrosas, lo que atrajo una gran cantidad de peregrinos que usaban el agua para curar sus males o la bebían con el mismo fin, estás acciones lo convirtieron en un foco de infección, esto, llevó a que se impidiera el acceso directo al pozo con una techumbre.
Entre 1777 y1791 se construyó este templo y fue obra del reconocido arquitecto Francisco Guerrero y Torres, es considerada una de las obras maestras del barroco novohispano y es la una de las pocas construcciones circulares del siglo XVIII que existen en México.
Está formada por un espacio ovalado central que sigue a un vestíbulo circular donde se ubica el pozo, y una sacristía octogonal cuyos lados son alternativamente rectos y curvos.
Guerrero y Torres utilizó como modelo un antiguo monumento romano en ruinas. Cubrió los tres espacios con cúpulas de diferentes tamaños y los cubrió con azulejos azules y blancos de Puebla, cuyos patrones crean una geometría curvada. Estas cúpulas están sostenidas por tambores que tienen el mismo acabado de mosaico. Los muros están construidos con tezontle y la fachada y ventanas son de piedra Chiluca.
El insurgente José María Morelos y Pavón al ser conducido al lugar de su ejecución en Ecatepec, le fue permitido pasar a esta capilla a orar un momento, antes de continuar su camino al lugar de su sentencia.
Forma parte del conjunto de edificios que se encuentran en la Villa de Guadalupe en la actual alcaldía Gustavo A. Madero de la Ciudad de México.
El 24 de junio de 1751, por cédula real es declarado Villa el antíguo pueblo donde se venera a la Santísima Virgen de Guadalupe. Poco después le fué concedido su escudo de armas. En ese año llega por primera vez a la fuente central, el agua potable por medio de una arquería.
La Antigua Parroquia de Guadalupe, es eregida en Colegiata el 9 de enero de 1725, por bula extendida por el Papa Benedicto XIII.
El 8 de mayo de 1756 se celebra la primera misa en la capilla llamada el Cerrito. El 27 de septiembre de 1772 se colocó la primera piedra para edificar el templo a N.S. de Guadalupe en el Tepeyac, en el mismo lugar donde estuvo la primera Ermita.
Durante el año de 1777 se comenzó a construir la capilla llamada El Pocito, a la solicitud de don Caristo González Abecerrete. Fue concluída por don Nicandro Aurrestegui y el arquitecto Francisco Guerrero Torres.
Es un templo perteneciente al Conjunto Religioso del Tepeyac, ubicado al oriente del cerro Tepeyac, Villa Guadalupe, en México. Fue construido bajo las órdenes del arquitecto Francisco Guerrero y Torres, entre los años 1777 y 1791.
Es en las faldas del cerro Tepeyac, donde este templo surge como de los primeros en este gran conjunto, sobresaliendo por su particular forma; en conjunto con elementos barrocos, que presentan dinamismo en su forma y línea, pero que en el fondo, representan una mezcla, tanto de lo traído de Europa, como lo propio del lugar y país donde se emplaza. Recibe este nombre debido a que se emplaza cercano a un manantial o pocito, donde el indio Diego tuvo la aparición de la Virgen del Guadalupe.
Se construyó entre 1777 y 1791 por el arquitecto Francisco de Guerrero y Torre, tiene un estilo barroco y es de las pocas que se caracteriza por tener una base circular.
Su nombre deriva del manantial de aguas azufradas que había antes de la construcción. El 22 de diciembre de 1815 acudió a esta capilla uno de los héroes de la Independencia de México, José María Morelos y Pavón, a adorar a la guadalupana antes de ser fusilado.
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