//Por; Jesús Hoyos Hernández//siglo XX//Guerrero//
Othón Salazar, el hijo más grande de la Montaña Alta de Guerrero.
Othón Salazar. Fue profesor y luchador social. Nació en Alcozauca de Guerrero, en la región de la Montaña, el 17 de mayo de 1924. Falleció el 4 de diciembre de 2008, a los 84 años de edad, en la ciudad de Tlapa, Guerrero.
El profe, el Tata, el Maestro Othón nació el 17 de mayo de 1924 en Alcozauca, en la región de la Montaña de Guerrero. Curtido en el campo, entre la pobreza y las injusticias, se fue creando una conciencia de lucha y compromiso social. Murió el 4 de diciembre de 2008. Fue velado en su casa, en Tlapa, en la colonia Jardín de Niños. La humildad con que vivía era respetable. Por ese entonces el Partido de la Revolución Democrática (PRD) era una opción electoral que ascendía con fortaleza en el país. A diferencia de otros miembros del Partido, dirigentes, ex presidentes municipales, líderes, que vivían en situaciones de mayor comodidad económica, el maestro Othón seguía en su humilde casa de adobe. Visionario y comunista, renunció al PRD por no coincidir con la cúpula, el burocratismo y las disputas internas por el poder. Su tumba se encuentra en su natal Alcozauca
“Hay una necesidad de estudiar intensamente y prepararse”.
Su historia personal es memorable. Desde niño su anhelo por estudiar y aprender lo llevo a estudiar cuestiones religiosas en el seminario de Chilapa. Posteriormente realizó estudios en las Escuelas Normales Rurales de Oaxtepec, Morelos (1942); Ayotzinapa, Guerrero (1943), y en la Benemérita Escuela Nacional de Maestros (1944 -1948), en la que fue dirigente estudiantil. Posteriormente en la Escuela Normal Superior de México (1951-1954) fue presidente del Comité de Huelga en 1954. Era la primera huelga que estallaba en la historia de dicha escuela. Fue profesor en varias escuelas primarias del Distrito Federal entre 1949 y 1960. Fundador de la Escuela Secundaria Anexa a la Normal Superior (ESANS) de México en 1955. De ahí fue expulsado al oponerse a que se expulsara injustamente a un alumno de tercer grado. También se desempeñó como profesor en la Escuela Secundaria N° 33 del Distrito Federal en 1956.
Othón Zalazar y su papel en el Movimiento Revolucionario Magisterial. Othón Salazar Ramírez (n. Alcozauca de Guerrero, Estado de Guerrero, 17 de mayo de 1924 - Tlapa de Comonfort, Estado de Guerrero, 4 de diciembre de 2008) fue un maestro normalista y revolucionario mexicano.
“Simpaticen o no, pero son los fundamentos científicos del comunismo. Ve los fundamentos. Son la base de la formación de la conciencia revolucionaria”.
La historia de su lucha y militancia política es larga. Fue organizador y dirigente de la lucha contra la “Doctrina Alemán” que intentaba publicitariamente buscar la reelección de Miguel Alemán a la Presidencia de México (1951); Miembro del Club Estudiantil Normalista de la Juventud Comunista de México de 1952 a 1953. Dirigente del Movimiento Revolucionario del Magisterio (MRM) de 1956 a 1977, en el Distrito Federal. El 30 de abril de 1958 el MRM tomó el edificio de la Secretaria de Educación Pública. La lucha se prolongó durante 38 días. Los maestros mantuvieron la toma de las instalaciones y obtuvieron el 19.5% de aumento a los salarios de los maestros del sistema federal, que significaba el aumento más importante obtenido hasta entonces por los trabajadores de la educación. La lucha magisterial marcó un hito en la historia del país.
Periódico el Sur, opinión
El 6 de septiembre de 1958 cayó en manos de la Policía Federal de Seguridad. Fue secuestrado y torturado durante 4 días en cárceles clandestinas. Fue sometido a proceso y consignado como preso político en el Penal de Lecumberri. La respuesta del magisterio fue el paro en todas las escuelas primarias, secundarias, jardines de niños del Distrito Federal. Othón y sus compañeros obtuvieron su libertad el 5 de diciembre de 1958. En ese periodo y estando todavía preso el 31 de octubre fue elegido Secretario General de la Sección 9 del SNTE por más de 12 mil votos contra 33. Por estar preso no pudo asumir el cargo.
En junio de 1960 el MRM, con Othón a la cabeza, toman el Teatro al aire libre de la Escuela Nacional de Maestros protestando por el desconocimiento de las autoridades al Comité democrático de la Sección 9. La resistencia del Magisterio en la Nacional de Maestros duró 83 días. La represión brutal por los cuerpos policíacos determinó la derrota del movimiento pero consolidó al MRM como corriente sindical democrática. En ese mismo año, junto a sus compañeros, fue cesado definitivamente por el Gobierno de Adolfo López Mateos como profesor. No volvió a ejercer como docente.
“¿Y ahora qué piensa hacer? Pelear. Con mayor razón pelear”.
Después del movimiento reingresó al Partido Comunista Mexicano (PCM) y llegó a ser miembro del Comité Central, de la Comisión Ejecutiva y responsable sindical. En 1964 se unió a la campaña por la presidencia de la república de Ramón Danzós Palomino, candidato del Frente Electoral del Pueblo (FEP). En 1974 diversos grupos de trabajadores y obreros lo eligieron como dirigente del Frente Sindical Independiente.
A su retorno a la Montaña de Guerrero promovió el MRM, impulso la lucha por la democracia y respaldo a los maestros en la represión sufrida el 7 de noviembre de 1979. En ese mismo año fue candidato del PCM a diputado federal por Guerrero derrotando al candidato priísta Rufino García Suazo. Sin embargo, El Colegio Electoral anuló los comicios. A pesar del fraude, Othón llegó a ocupar la curul de la Cámara de Diputados por el principio de representación proporcional durante el periodo de 1979ª 1982. En 1980 fue postulado como candidato a gobernador del Estado de Guerrero por el PCM. En 1985, como comunista, empezó a promover un programa de Juntas Patrióticas con el propósito de concientizar a las masas de la voracidad imperialista de los Estados Unidos. De 1987 a 1989 fue Presidente Municipal de Alcozauca y diputado por el PRD por la vía plurinominal de 1992 a 1994.
Othon Salazar encabezó la gran revuelta magisterial en la sección novena del SNTE cuando en los cincuenta y los sesenta luchar era exponer,arriesgar la vida y la libertad.Othon pagó su audacia con varios años de cárcel en Lecumberri en los años cincuenta. Persevero’, se mantuvo firme , sin claudicar , logró modificar la situación interna , ganó la sección y figura en la historia de Mexico, Othon fue un educador de luchadores de izquierda, suman miles los y las maestras que todavía recuerdan sus discursos en la SEP... Othon luchaba y educaba a sus compañeros para avanzar , para triunfar a sabiendas de que la lucha por el desarrollo y la democracia no tiene fin. Othon fue un mexicano honesto y honorable, tenia una forma de vida austera , fue mucho más de lo que carecía que lo que poseía. Su patrimonio era moral.
“No todo está perdido hay jóvenes con espíritu de lucha”.
Su actividad política era intensa. En 1996 promovió la creación del Consejo Regional de la Montaña. Un organismo que logró articular e incluir a organizaciones sociales, civiles y productivas de la región con el objetivo de promover un Programa de Desarrollo Integral para la Región de la Montaña de Guerrero. En 1998 abandonó el PRD junto con Gilberto Rincón Gallardo y otros de sus compañeros de la vieja guardia comunista y promovió un nuevo partido, el Partido Democracia Social (POS) reivindicando el socialismo. Posteriormente se alejó de esta agrupación por no compartir sus formas de hacer política. El 17 de julio de 1999, impulsó la constitución del Movimiento Socialista de la Montaña y durante sus últimos años de vida siguió promoviendo el resurgimiento del Partido Comunista. Con su muerte dejó un legado desde la izquierda y como un hombre surgido desde la Montaña que luchó contra las injusticias. Al igual que muchos hombres y mujeres que han luchado por transformaciones en la región.
“Nosotros no hacemos nada por impedir que el capitalismo siga avanzando. Un comunista como yo no puede rendirse fácilmente. Estoy firme y decidido de lo que he estado haciendo durante más de medio siglo”.
Extracto del ensayo inédito y entrevistas “Pláticas con Othón” de Jaime García Leyva.
David Alfaro Siqueiros durante su prisión en Lecumberri, celdas C, 1960.
El 9 de agosto de ese año fue aprehendido violentamente
por el jefe del Estado Mayor Presidencial, José Gómez Huerta, en la casa de
Álvaro Carrillo Gil, donde se había refugiado con Othón Salazar y los
dirigentes del movimiento ferrocarrilero Demetrio Vallejo, Valentín Campa y
Encarnación Pérez. Fue acusado por el gobierno de Adolfo López Mateos de
disolución social y permaneció tras las rejas cuatro años, pero, al menos
durante los primeros meses, no dejó el pincel. “Estaba acostumbrado a pintar en
grandes proporciones; por eso le cayó como anillo al dedo elaborar
escenografías para los presos que organizaban puestas en escena”, Vivian
Gorinstein.
Fue también durante su infancia que Othón tuvo una cercanía con la iglesia católica, ya que solía servir como monaguillo durante las celebraciones de misa en el templo de Santa Mónica en su natal Alcozauca.1 Desde el púlpito arengaba a multitudes imaginarias una vez que el templo se quedaba vacío, con la complacencia y guía del cura David Salgado, quien veía en él las características necesarias para Los estudios religiosos en el seminario y bajo el auspicio del obispo de Chilapa, Leopoldo Díaz Escudero. Esa habilidad oratoria desarrollada desde temprana edad la que le serviría al futuro líder socialista para mover masas de hombres en su lucha por la educación y por condiciones más justas para los maestros rurales.
En 1942, Othón llegó a la normal de Oaxtepec. Eran los últimos años de ésta escuela normal rural que estuvo funcionando de 1928 hasta 1944.2 Allí, los maestros veían los últimos relámpagos de la Revoluciónmexicana, lo que los dejaba con muchas inquietudes sociales. Cursó sólo el primer año en Oaxtepec. El segundo lo hizo en la normal de Ayotzinapa y el tercero en la Escuela Nacional de Maestros. Después ingresó a la Normal Superior, donde estudió cuatro años, ahí se especializó en ciencias sociales para la enseñanza del civismo. En 1954 fue un dirigente importante de la primera huelga de la Normal Superior. En 1956, cuando los líderes oficiales del SNTE negociaron un incremento salarial que no llegaba ni a la mitad de la demanda inicial, Othón convocó a un mitin de protesta. Y el 3 de julio de ese mismo año encabezó el movimiento magisterial de masas más grande que haya visto el país, en una lucha contra las injusticias provocadas por los cacicazgos que han existido en ese sindicato magisterial.
Poco después, una asamblea independiente lo eligió representante, formando las bases para el Movimiento Revolucionario del Magisterio (MRM) que se constituyó a finales de 1957 y cuya presencia en las escuelas primarias del Distrito Federal se fue expandiendo. En el siguiente año el MRM estuvo al frente de una de las luchas magisteriales más importantes. Las movilizaciones a las que convocaba eran atendidas por un amplio sector social, y el gobierno, al reprimirlas, como hizo con la marcha del 12 de abril de 1958, fomentaba un descontento social que llevaba años gestándose. Mientras las autoridades se rehusaban reconocer al MRM, éste tuvo cada vez más capacidad de convocatoria y el 30 de abril los maestros tomaron las oficinas de la SEP y obligando al gobierno a negociar. En agosto, en un congreso paralelo, los maestros de la Ciudad de México eligieron a Othón como su legítimo representante, pero ante este gesto de autonomía sindical, la posición del gobierno se fue endureciendo. La manifestación del 8 de septiembre fue reprimida, y Othón, aprehendido. Las autoridades llegaron temprano a su casa, lo amarraron y lo vendaron. Lo sometieron después a violentos interrogatorios y le exigieron que confesara cuántos rublos recibía de la Unión Soviética. Lo mantuvieron secuestrado nueve días antes de procesarlo. Acusado de disolución social, fue encerrado en Lecumberri, pero, gracias a las grandes movilizaciones por su libertad, permaneció allí sólo tres días.
El año de 1958, año de gran efervescencia laboral, en los maestros del MRM estuvieron entre sus principales protagonistas. Ese mismo año las movilizaciones de los telegrafistas, petroleros y ferrocarrileros conmovieron al país. Las luchas tuvieron sus orígenes en demandas económicas, pero su aspiración por la democracia sindical tuvo implicaciones mucho más amplias, y sacudieron las estructuras mismas del PRI. A una década del famoso "charrazo" (cuando Lombardo Toledano entregó las organizaciones obreras al corporativismo estatal) y en pleno "milagro mexicano", los trabajadores mostraban con su inconformidad las condiciones laborales que las estadísticas del milagroso crecimiento económico ocultaban. Solo con represión, brutalidad, despidos y cárcel el Estado logró derrotar estos movimientos que se proponían democratizar al sistema. Pero no pudo silenciar a los participantes, que siguieron empeñados en mantener vivas las causas populares.
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